Hola a tod@s,
estos últimos días he tenido un
poco abandonado el blog.
He estado, junto a mi compañero,
en el Seminario Internacional de Eventos
Mundiales y Cambio Urbano en Sevilla. Allí presentamos dos comunicaciones
que forman parte de una investigación conjunta que llevamos unos años
realizando.
La primera de ellas, está
titulada “La belleza de lo efímero” y
la segunda, “Pekín-Beijing: la gran
marcha”. A continuación os dejo los resúmenes de ambas.
LA BELLEZA DE LO EFIMERO
El valor de la identidad en la
reconstrucción de los pabellones.
Autores:
Virginia Arnet Callealta/Enrique Naranjo Escudero
La presente comunicación tratará de explicar los procesos de
reconstrucción de pabellones proyectados como arquitecturas efímeras y la
necesidad de la ciudad de reubicarlos para mantener su capacidad icónica y
conceptual. Explicaremos cómo eso afecta a la identidad del pabellón como
objeto y al conflicto que se produce en su entorno urbano al acoger un edificio
que le es ajeno.
Las exposiciones han sido
siempre un terreno propicio para la experimentación y la posibilidad de
construir pabellones efímeros ha sido relevante a la hora de proponer nuevas
arquitecturas y de ir marcando poco a poco el devenir de su historia. Sin
embargo, que cada país considere su pabellón como objeto presencial y de
promoción en el espacio físico de la ciudad organizadora y su imagen le
confiera el carácter de icono publicitario, ha derivado en no quedarse con el
éxito efímero de una exposición temporal, convirtiéndose en auténticos iconos turísticos,
reflejos de lo que fueron en otra época y en otro lugar.
En este sentido, algunos ejemplos como el pabellón de la URSS de
Melnikov para Paris o el Pabellón de L´Esprit Nouveau de Le Corbusier,
manifiestan una necesidad contemporánea de mantener la fuerte significación
conceptual de algunas arquitecturas efímeras.
Otro proyecto que se volvió a levantar ajeno al ambiente de la
exposición de Paris, para la que fue proyectado fue el Pabellón Español de JL
Sert. La simbiosis entre arquitectura y arte, dio como resultado una especie de
museo de arte contemporáneo, símbolo de la lucha por la libertad
antifranquista, que resultaría un autentico hito cultural para la época,
reuniendo un elenco de artistas de nivel insuperable. Tras su reconstrucción en
1992, el edificio solo queda como objeto, pero toda la potencia que alcanzó
como icono, generada por la multiplicidad de agentes externos, fue consecuencia de una situación temporal
que ya no existe. Las obras de su interior fueron llevadas a Valencia y muchas
están en museos, distribuidas por toda España. En Barcelona, el edificio está
expuesto como mero objeto contemplativo como una más de las esculturas que allí
cohabitan.
De la misma forma, la reconstrucción por Sola Morales, del
Pabellón alemán del 29, previa ligera modificación de proporciones y
materiales, ha permitido que la copia instalada haya suplantado la identidad
del edificio original.
En definitiva, explicaremos el proceso de transformación
identitario en la relación entre el pabellón y la ciudad, y cómo motivado por
el gran desembolso económico realizado por los gobiernos para la construcción
de un pabellón en el extranjero, hace que algunos, tras finalizar las
exposiciones, se desmonten para reconstruirse en algún lugar inhóspito de sus
países de origen, ya que el pabellón ha empezado a convertirse en un icono; entendiendo,
por tanto, que al empezar a formar parte de la historia de la arquitectura
deben reubicarse en sus países de origen para continuar ejerciendo un reclamo
promocional, sin entender que los condicionantes externos son los que le
confieren ese valor identitario y que, desubicados, quedarán relegados a meros
objetos de contemplación.
PEKIN-BEIJING: LA GRAN MARCHA
La explosión global de la ciudad olímpica
Autores:
Virginia Arnet Callealta/Enrique Naranjo Escudero
La presente comunicación intentará explicar el proceso de
transformación cultural e identitaria de Pekín a raíz de su designación como
sede olímpica en 2008. Explicaremos la importancia de la arquitectura como
elemento icónico de esa revolución cultural en su giro a occidente.
Los eventos deportivos han visto incrementado el interés del
público, gracias al poder de difusión que permiten las nuevas tecnologías. Un
evento de este tipo, retransmitido a nivel mundial, permite al organizador casi
un mes completo de publicidad ininterrumpida sobre su producto(ciudad). Por
eso, la elección de las sedes implica
decisiones sociales, culturales, políticas y de infraestructuras que van más
allá su carácter deportivo.
Explicaremos cómo la celebración de los Juegos en Pekín han
posicionado definitivamente a China en el mundo contemporáneo como la principal
cabeza visible del escenario global del comienzo del siglo XXI, alejándola de
la vieja guardia roja y permitiendo una transformación radical que afecta tanto
a su territorio físico o su paisaje, como a su cultura; otorgándole, a la vez, afirmación
nacional y legitimación global.
La mayoría de los proyectos han sido intrusos globales en el
destruido paisaje local. Y es que el carácter de simbolización de los nuevos
iconos ha prevalecido frente a otros aspectos como su adaptación al entorno
urbano o la referencia local. Incluso la actuación urbanística de A. Speer Jr,
rememora las formas simbólicas de un imperio.
Explicaremos cuales han sido las decisiones políticas y culturales
en los proyectos más importantes como el aeropuerto o el teatro de la opera, y
su repercusión en el paisaje pekinés y en la arquitectura contemporánea, y
abordaremos la repercusión de los dos elementos más determinantes de esta
transformación: El Estadio Olímpico y el proyecto para CCTV, encargados a los
dos estudios europeos de mayor repercusión mediática.
La potencia del Estadio es su valor como logo,
confeccionado desde el principio como un icono, para ser el escenario de cada
una de las imágenes de los deportistas recibiendo las medallas que pasarán a la
historia. Tras el proyecto de Herzog
& de Meuron y los fuegos artificiales dirigidos por ordenador, ninguna
prueba deportiva logró eclipsar la espectacular puesta en escena del conocido
como ‘nido de pájaro’.
Además, los responsables de planificación urbana entendieron que
sin un distrito financiero central y bien comunicado, difícilmente la ciudad
podría convertirse en capital mundial. Este distrito, por supuesto, también
debería ir encabezado por un proyecto icónico para ser presentado al mundo como
un escenario de la innovación tecnológica y de las comunicaciones: la sede de
la CCTV (el gran emporio televisivo y mediático estatal), que asemejaría a
Pekín a una de las grandes capitales financieras del mundo.
En definitiva, intentaremos entender el proceso de transformación
global que ha sufrido Pekín, cómo ha afectado esto a su territorio y paisaje
local, y como la posibilidad mediática que ofrecen las nuevas tecnologías han
configurado un paisaje icónico que ha posibilitado el gran salto a occidente de
la capital china.
Si queréis más información al respecto, podéis leer el texto
completo de ambas comunicaciones en la página web del estudio de mi partner en este enlace.